Equilibrio ácido - base

Hola a todos mis queridos compañeros, espero que todos se encuentren muy bien, un cordial y afectuoso saludo a todos. Vamos a continuar con la información de la materia, ya en la recta final, de esto, en esta ocasión vamos a tratar el tema de equilibrio acido – base.

Partiremos del hecho de saber que los pacientes que serán intervenidos quirúrgicamente, son propensos a sufrir trastornos acido – base, que pueden estar desencadenados por la patología base, es decir, el motivo de la cirugía, o también a otros factores concomitantes, estos trastornos se presentan en diversos contextos, por lo que es importante identificarlos, clasificarlos, diagnosticarlos, y tratarlos de manera oportuna, ya que la mayoría pueden poner en riesgo la ida del paciente.

La mayoría de estos trastornos resultan de afectaciones que alteran el equilibrio entre la producción y excreción de ácidos y bases, es decir que alteran el pH, que en condiciones normales se encuentra entre los 7.35 y 7.45, un nivel mas bajo de este pH, indicaría acidosis y un nivel más alto correspondería a la alcalosis, por lo que la regulación del pH esta encaminado en mantener ese equilibrio entre la producción y excreción de ácidos y bases.

Generalmente el ácido producido se amortigua con la presencia de bicarbonato, aunque existen mas sustancias amortiguadoras, o Buffers, como el fosfato, proteínas como la hemoglobina y el carbonato óseo, el ácido carbónico o CO2, que es un acido que se produce por la dieta, que se conforma de 2 componentes, una pate volátil que es excretada por los pulmones y una parte fija, que es excretada r el riñón, este riñón, que es importante para esta regulación, realiza modificaciones para poder lograr su objetivo, como la reabsorción y generación de bicarbonato, produce y elimina amonio (NH4), además de la utilización de sulfatos y fosfatos para poder eliminar hidrogeniones.

Dentro de los productos que de obtienen del catabolismo de nutrientes podemos encontrar al ATP, agua, ácido carbónico, cuerpos cetónicos, urea, creatinina, acido úrico, fosfatos y sulfatos ácidos, a los que se van agregando hidrogeniones mismos que se amortiguan por el bicarbonato, o COH3, en tanto que las bases de sulfato y fosfato, se equilibran con los cationes para formar sales, y como mencionamos estas sales son utilizados para eliminar hidrogeniones por la via renal, dentro de los productos que se obtienen de la utilización de lípidos y carbohidratos podemos mencionar al acido láctico y al acido acetoacético, que se catabolizan para obtener CO2 y H2O, esta acción se lleva a cabo a nivel renal por acción de la anhidrasa carbónica, utilizando al CO2 y H2O como fuente de hidrogeniones que se pueden intercambio por Na+ en la orina, de tal manera que lo que se excrete sea hidrogeniones y se reabsorba Na+ con ganancia de bicarbonato resultante de esta conversión.

De manera general, podremos decir que se denominan acidosis o alcalosis metabólicas a las condiciones en las que se tiene alteración del bicarbonato, y acidosis o alcalosis respiratoria a los procesos en los que se ve alterada de manera inicial la PCO2, estas condiciones se intentan compensar por el organismo, acción que no siempre es muy funcional, y para poder diagnosticar de manera asertiva estos padecimientos acido – base, es importante realizar una adecuada anamnesis, una gasometría arterial y electrolitos séricos.

La punción arterial para la obtención de la muestra para la gasometría se debe realizar en la extremidad en la que se observe un adecuado aporte sanguíneo, se debe utilizar una jeringa que se prepara con 0.1 ml de heparina, para evita la coagulación de la muestra, además de evitar exceder esta cantidad para evitar un falso positivo del pH de la muestra, esta muestra se debe analizar de manera inmediata, pero puede se puede mantener en red de frio hasta 2 horas.

Existen 4 tipos de trastornos acido – base que se denominan primarios, que son la acidosis metabólica, en la que el pH esta disminuido y disminución del bicarbonato, la alcalosis metabólica en las que el pH esta elevado al igual que el bicarbonato, la acidosis respiratoria, que se caracteriza por una elevación del pH, y una disminución de la presión parcial de oxígeno, y la alcalosis respiratoria, en las que el pH se encuentra elevado y el CO2 disminuido.

En un paciente, se pueden presentar solo hasta 3 tipos de alteraciones acido básicas primarias, cuando 2 son metabólicas una es respiratoria, no es posible la asociación de 2 alteraciones respiratorias, debido a que a nivel pulmonar solo se pueden presentar un evento fisiopatológico, o hay hiperventilación o hay hipoventilación, por lo que para poder realizar la interpretación de un desequilibrio acido – base, debemos integrar los datos en dos partes, la primera, es realizar el análisis de los parámetros y cálculos bioquímicos que indican la presencia del trastorno, y la segunda, realizar la correlación sobre los datos clínicos del paciente, con los datos gasométricos analizados, con lo cual se busca comprender desde un nivel bioquímico la patología base, por lo que podemos agregar, que cuando el átomo de hidrogeno pierde a su único electrón, el protón queda libre, y a este protón se le denomina hidrogenión.

El aumento de hidrogeniones, es un indicador de un aumento en la actividad acida, y por el contrario un descenso en su concentración, indicara una disminución de la actividad acida, o también denominado aumento de la actividad alcalina, esto es importante puesto que una alteración de esta actividad acida o alcalina, conllevan a disfunción celular y desnaturalización de proteínas, esta actividad de los hidrogeniones es medida en unidades pH, por lo que se puede deducir que el pH corresponde a el potencial de hidrogenión, al ser medido.

A nivel plasmático este pH suele ser un tanto alcalino, de 7.40, en tanto que el pH intracelular suele ser mas acido, 7.34, teniendo entonces que un rango de pH compatible con la vida es de 6.8 a 7.8, en condiciones normales el pH venoso es 0.03 a 0.04  menor que en la sangre arterial, la PCO2 es 7 a 8 ml/Hg mayor que en la arterial, el bicarbonato es 2mEq/l menor en la sangre venosa, esto es importante saberlo, debido a que en ocasiones la muestra que se toma es de sangre venosa y no arterial, por ejemplo en un paciente con diagnostico de paro cardiaco, podemos encontrar estas diferencias bien acentuadas, el pH arterial es de 7.41, en tanto que el venoso es de 7.15, la PCO2, es de 32 en la arterial y de 74 en la venosa, pero para saber que es anormal, debemos conocer los parámetros normales esperados en promedio, el pH normal radica entre los 7.35 y 7.45, la PCO2, radica entre los 35 y 34 mm Hg, y el bicarbonato entre los 22 y 26 mEq/l.

Sabemos que para poder mantener el equilibrio ácido – base, contamos con las sustancias buffer, por lo que, para poder medir este equilibrio, es importante conocer la relación entre el bicarbonato y el acido carbónico, ambas sustancias buffer, por lo que podemos decir en concreto que Lam concentración de hidrogeniones o pH depende de la relación entre el bicarbonato y al acido carbónico, que corresponde a la PCO2.

En la siguiente sesión continuaremos hablando de este tema, por lo que te recomiendo que le des un repaso a esta información, recuerda que al término de la lectura debes realizar un mapa conceptual sobre el equilibrio ácido – base.